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viernes, 1 de abril de 2011

Las lecciones aprendidas a base de las sellos son difíciles de olvidar

En un artículo publicado en la Revista España y América de Barcelona en el siglo pasado, el corresponsal de prensa italiano Leonardo Kosiemski cuenta el ingenioso método de enseñanza que emplea el italiano Gastón Rizzo, maestro titular de una escuela elemental de una población de la provincia de Verona. Este profesor era un apasionado filatelista y convencido de que en los sellos se hallan todas las materias pedagógicas, su pasión le ha inducido a crear un original método de enseñanza de las asignaturas obligatorias; historia, religión, gramática, geografía. Aritmética, geometría, y caligrafía, sirviéndose de los sellos exclusivamente.

Existe un librito ilustrado de su método titulado “Dei Raccoglitoré”, (valor didáctico y pedagógico de la filatelia en la escuela) explicando su aplicación práctica.

Al iniciar el curso, el profesor invita a sus alumnos, que lleven a la escuela sellos de todas clases, procedentes de la correspondencia de sus familiares y amigos. Empieza enseñándoles la forma correcta de limpiarlos y luego adherirlos en un cuaderno, a modo de álbum, siempre en la mitad derecha de la página, dejando el lado izquierdo para escribir las notas u observaciones necesarias.

En todas las asignaturas, el sello es utilizado como materia prima y persuasiva que ilustra el tema tratado.

Las lecciones aprendidas a base de ilustraciones de las sellos son difíciles de olvidar dicen los profesores.